Durante al curso de tercero unos de los practicum que debemos realizar es la estancia durante un mes aproximado realizando practicas en una residencia.
La residencia de ancianos, todos pensamos lo mismo cuando entramos allí: o me va gustar mucho o por favor que se pase rápido.
En mi caso fue el "por favor que se pase rápido", me considero un persona con poca paciencia y el "nena me traes esto" "niña llevame allí que no puedo" o el "¿y esta pastillita para que es? (y ves que tiene 5 iguales y no tienes ni idea) te complican un poco el mes.
Dentro de este practicum te das cuenta que los cuidados de geriatría son mas difíciles e importantes de lo que los has tenido en cuenta hasta ahora.
Los cuidados de enfermería están muy enfocados a la administración de la medicación, los conceptos de farmacología, dados allí por primero de carrera, adquieren gran importancia, las dosis, los horarios y el control del propio paciente de todos, puesto que las hipertensiones, los ingresos por ACV y los diabéticos mal controlados, está a la orden del día.
Se trata de un entorno donde la enfermería tiene gran independencia y todo ello con su responsabilidad asociada, el médico pasa consulta entre semana por la mañana pero por la tarde y por la noche la frase es "apeñatelas como puedas". Exacto como puedas, material escaso y la necesidad de actuar de inmediato en caso de emergencia hace que una correcta preparación sera mas que necesaria.
Cuidados intravenosos, control de dosis, técnicas de intubación, cuidados por aspiración...etc. En definitiva mil ojos durante horas.
Los cuidados por excelencia son las úlceras, no hay mejor sitio para aprender curas y cambios posturales que una residencia. Aprendes a usas las cremas que desbridan, los apositos que sirven de protección, que actuan como segunda piel, los que secan, los aceites que van para una cosa y no para otra y un largo ecétera.
Todo esto te hace reflexionar y ver que aunque sean como niños son a la vez especiales de forma diferente, con forme pasa el practicum aprendes a hablar con ellos, consigues que hagas lo que quieres (aunque si dicen que no, es que no) y como todo en la vida, cuando alguno falta lo hechas de menos.
Pasado el mes cambia tu forma de ver los cuidados geriátricos pasas de un "no yo ahí no" a un "vale" teniendo siempre en cuenta que es un trabajo mucho mas agotador psiquicamente y sabiendo que probablemente al acabar la carrera acabaremos allí antes que en un hospital. Me alegro de haber podido estar un mes con "mis abuelitos". Aprendes a cuidar y al que no puedes cuidar, lo acompañas lo mejor que has aprendido.